Cigüeña común

(Ciconia ciconia)

"White Stork"
"Cegonha-branca"

Orden: Ciconiiformes                                        Familia: Ciconiidae 

OBSERVACIÓN:

Es habitual observarlas sobrevolando el parque.

DESCRIPCIÓN:

La Cigüeña común, también llamada Cigüeña blanca, es un ave de gran tamaño y notable envergadura. Puede alcanzar de 100 a 115 cm de altura, y una envergadura alar de 155 a 195 cm. Su peso varía de 2.3 a 3.9 kg. Ambos sexos tienen una apariencia idéntica, aunque los machos suelen ser algo más grandes que las hembras. Lucen un característico plumaje blanco con las plumas de vuelo de un vivo color negro. 

Presenta unas patas largas de un intenso color rojo-anaranjado en los ejemplares adultos y rosadas en los más jóvenes; un cuello largo y un largo pico recto y puntiagudo de tonalidad rojiza o anaranjada muy intensa en el caso de los adultos, rojo sucio en los ejemplares juveniles y prácticamente negro en las crías. Al nacer, los pichones están parcialmente cubiertos de escasos plumones cortos y blanquecinos. A la semana, estos primeros plumones se sustituyen por una capa más densa de plumón lanudo blanco, y a las tres semanas, el ave juvenil adquiere las plumas de vuelo de color negro.

En vuelo adopta una postura muy característica, con el cuello y las patas estiradas, y presenta unas alas largas y anchas que le permiten planear con facilidad. El aleteo es lento y regular. 

Camina a un ritmo lento y constante con el cuello estirado. En contraste, a menudo retrae su cabeza entre sus hombros cuando descansa.

Se trata de una especie bastante longeva, pudiendo llegar a alcanzar los 20 años de edad.

HÁBITAT:

Se trata de un ave muy ligada al hombre y a sus actividades productivas. Habita en lugares de vegetación despejada, como dehesas, regadíos, pastizales ricos en ganado, cultivos de secano, así como zonas húmedas y herbazales naturales, en los que busca su alimento. Evita, sin embargo, las áreas forestales y muy montañosas. También es habitual observarlas sobre los campanarios de las iglesias y otras construcciones del ser humano donde construyen sus nidos.

ALIMENTACIÓN:

Se alimenta de una amplia variedad de presas animales. La alimentación básica consiste en insectos (entre los que se incluyen principalmente escarabajos, saltamontes, langostas y grillos), lombrices, lagartijas, ranas, culebras, e incluso pequeños roedores. Presas menos comunes son las crías y los huevos de otras aves, peces, moluscos, crustáceos y escorpiones.

Caza principalmente durante el día, caminando por la tierra, tragando enteras a sus presas pequeñas, aunque suele matar y partir a las presas mayores antes de tragarlas.

Su dieta varía según la temporada, la localidad y la disponibilidad de presas.

REPRODUCCIÓN:

Forman parejas de por vida y frecuentemente anidan en colonias. La puesta es realizada entre los meses de marzo y abril y consta de 3 o 4 huevos de color blanco. La incubación dura entre 29 y 34 días y de ella se ocupan ambos sexos, si bien es la hembra la que le dedica mayor tiempo a la tarea, mientras su pareja le proporciona el alimento. Las crías reciben los cuidados de ambos progenitores, se desarrollan completamente en 54-68 días, y son independientes al cabo de unos tres meses.

NIDIFICACIÓN:

Por lo general, seleccionan un lugar alto donde construir el nido; sobre los árboles, los riscos de las montañas, postes del tendido eléctrico o sobre casas u otras edificaciones. En cautiverio anidan en el suelo. En España, más del 50% de los nidos se localizan en todo tipo de construcciones humanas: iglesias, depósitos de agua, chimeneas, torretas de electricidad y antenas, transformadores eléctricos, casas de campo, ruinas y edificios monumentales.

Los nidos son construidos por ambos progenitores, aunque con mayor aporte de material a cuenta del macho, siendo reutilizados durante varios años en los cuales les van añadiendo nuevo material. Son elaborados con ramas, palos, raíces, tierra y estiércol, y su interior lo forran con material suave.

Eventualmente algunos nidos llegan a medir hasta 1.5 metros de diámetro y 2 metros de alto y pesar unas 2 toneladas.

CANTO:

Por lo general, se trata de una especie bastante silenciosa, emitiendo ciertos sonidos ásperos de alarma ante la presencia de individuos extraños cerca del nido. El sonido más característico es un sonoro castañeteo producido al entrechocar las mandíbulas, conocido como "crotoreo", que el ave ejecuta como salutación hacia su pareja.

MIGRACIONES:

La Cigüeña es un típico migrador que, hasta hace relativamente poco tiempo, solo aparecía en el territorio ibérico durante la época de reproducción. Durante el verano anida al norte de su distribución. En otoño se trasladan hacia el sur. Muchas vuelan a la Península Ibérica para atravesar el mar donde es más estrecho, entre Gibraltar y Marruecos. El resto de la población europea efectúa la travesía por el Medio Oriente, volando sobre Israel y la Península Sinaí. Este comportamiento es natural en muchas de las aves migratorias que anidan en Europa.

En los últimos años, con el aumento en la población de la Cigüeña blanca en Europa, en gran parte gracias al cuidado y al respeto que se le ha dado a esta especie, algunas demuestran preferencia por no cruzar el Mediterráneo.

Cigüeña portando ramas para la construcción del nido

AMENAZAS Y CONSERVACIÓN:

Históricamente, las amenazas más importantes para esta especie han sido los distintos episodios de sequía sufridos en su área de invernada en África, los cuales provocaron una significativa reducción en la disponibilidad de presas y, como consecuencia, el descenso de la población. La pérdida de hábitats de alimentación debido a las transformaciones agrarias, los pesticidas, la caza ilícita, los choques contra los tendidos eléctricos, la eliminación de los nidos, etc; también son causantes del descenso de las poblaciones. Por estos motivos, la Cigüeña común se considera "De interés especial" en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.